Ochoa evita remontada de la Roma y Salernitana sale con el empate
El equipo del portero mexicano sacó un punto de su visita a los de Mourinho.
EFE — Después del gran éxito europeo, Roma se dio de bruces con su realidad en una Serie A, en la que en los últimos meses es incapaz de mostrarse efectivo ante cualquier rival, como le sucedió este lunes ante el Salernitana, del portero mexicano Guillermo Ochoa, contra el que rescató un empate insuficiente (2-2).
Lo que se presentó como una tarde festiva en el Olímpico acabó siendo un ‘deja-vú’ de las últimas noches vividas en el campeonato doméstico, en el que no gana desde el pasado 16 de abril ante el Udinese, lo que le obliga a ser quirúrgico en las dos últimas jornadas que restan para poder mantener el sexto puesto.
Una plaza a la que ha conseguido auparse con el empate y gracias a la sanción impuesta al Juventus de 10 puntos, que hace caer al equipo blanquinegro al séptimo hueco de la tabla.
En un choque con duelo de lusos en los banquillos, José Mourinho y Paulo Sousa, fue el segundo el que celebró primero en un estadio ávido de poder festejar con sus jugadores el pase a la final de la Europa League en la que se medirá al Sevilla.
Un golazo de Candreva en el minuto 12, un remate casi acrobático dentro del área para poner el balón en una escuadra, ya puso de manifiesto que el Roma, con varios suplentes en el campo y todavía condicionado por las numerosas lesiones, entre ellas la de Paulo Dybala, iba a volver a las andadas.
Intentó evitarlo El Shaarawy con un gol en la que fue su primera titularidad tras la lesión, aprovechando un rechace de ‘Memo’ Ochoa en una falta que cazó el italiano para devolver la alegría a un Olímpico venido a menos.
Pero poco duró esa alegría en la casa ‘giallorossa’, menos de diez minutos, lo que tardó Boulaye Dia en cazar un balón suelto en el corazón del área y poner de nuevo por delante a un Salernitana sin nada en juego con un bonito taconazo con el que superó a Rui Patricio.
De nuevo, otro golpe con la realidad de un equipo que, si bien ha sabido competir en Europa, le ha faltado regularidad dentro de sus fronteras durante la temporada, asediado en ocasiones por la mala fortuna y las lesiones. Pero si algo caracteriza a este equipo es que es capaz de crear peligro en situaciones adversas, incluso viéndose ligeramente superado, porque sabe aprovechar sus armas.
La entrada de Abraham, Matic, Cristante y Pellegrini elevó el peligro en cualquier balón parado, una de las armas más efectivas de los romanos, que de hecho aprovecharon un saque de esquina en el minuto 83 para rescatar un empate insuficiente, gracias al tanto de Matic, pero válido para meterse en Europa.
El Roma se juega mucho en apenas dos semanas. Primero ante el Fiorentina, luego ante el Sevilla y por último ante el Spezia. Tres partidos que pueden colocar al equipo en Liga de Campeones, en Europa League, en Conference League o dejarlo fuera de las tres. Todo por decidir.