Lewis Hamilton, campeón del mundo de F1
El británico de 33 años, cuarto en México, igualó a Fangio con 5 títulos en México tras sufrir mucho en pista por la degradación de sus gomas
“Fangio es el padrino de todos los pilotos. Es uno de los grandes desde el comienzo de este deporte y siempre será admirado. No puedo creer que le pueda alcanzar”, dijo Hamilton hace días. Y este domingo, deberá empezar a asimilar la hazaña que logró en el GP de México. El británico de 33 años se proclamó en el Autódromo Hermanos Rodríguez pentacampeón de F1 e igualó al mítico piloto argentino, y ya está a tan solo 2 del hombre con más Mundiales, Michael Schumacher.
Al ritmo que va, nadie se atreve a decirle que no puede lograrlo. Y es que cuando a Hamilton le dicen algo así, responde en pista con éxitos y títulos, como lo hizo de nuevo en este 2018, cuando parecía que su Mercedes era inferior al Ferrari. Pero resurgió de las cenizas para ganar, como lo ha hecho en toda su vida, cuando en su barrio sufría insultos racistas, sus profesores le decían que no llegaría a nada en la vida y en los circuitos de karting le miraban por su color de piel y su procedencia humilde. Pues ahí está. El primer piloto negro de la historia de F1 ya tiene 5 Mundiales, y lo consiguió tras una carrera en la que volvió a demostrar que también sabe sufrir, porque eso es lo que hacen los campeones. A Lewis le bastó con ser cuarto par vencer el Mundial en el día en el que Verstappen logró el triunfo ante Vettel (2º) y Raikkonen (3º), que completaron el podio.
El británico lo tenía todo para cantar el alirón este domingo. Le bastaba con que Vettel no ganara, y con un Verstappen intratable, la corona sería para Lewis. El de Mercedes lo sabía, y pese a ello, en lugar de mantener la calma, su objetivo era ir a por el triunfo para conseguir el cetro a lo grande. Sin embargo, terminó sufriendo mucho en pista por sus problemas de neumáticos y se quedó incluso fuera del podio.